Thursday, December 7, 2006

"Creo que la táctica es lo de menos"

¿Qué es lo que busca en sus equipos?

Lo que yo trato de conseguir, que en algún momento lo consigo y en otros no tanto, es que el equipo tenga pausa y tenga elaboración. Es decir, si uno tiene la pelota y busca el arco contrario rápidamente lo que consigue es chocar. No se puede atacar desde cualquier lugar de la cancha porque uno choca porque está muy lejos. Uno tiene que distraer, como en cualquier otro juego, como en el truco, como en el ajedrez, uno distrae, distrae para encontrar el momento oportuno para atacar y en el fútbol lo mismo, entonces hay que tocar. Toque significa distracción. La jugada de pronto aparece, entonces cuando aparece la jugada ahí voy a buscar el gol. Si yo trato de forzar la jugada como se hace ahora choca, entonces se juega mal, pierdo la pelota, y ellos me la dan a mí, yo se las doy a ellos porque todo es choque, nada es claro. Entonces yo trato de explicar eso y de hacer eso en los entrenamientos. Yo trato de entender el juego, mi preocupación es que el jugador entienda el juego, más que la táctica. La táctica, desde mi punto de vista es importante, pero es secundaria.


¿Se debe respetar la táctica?

Yo creo que no, pero eso es una discusión también interesante para hacer y no la otra discusión si este es romántico o este es practico porque eso es una estupidez. Creo que la táctica es lo de menos, creo que lo más importante son los conceptos fundamentales del juego porque la táctica no es otra cosa que cómo ocupamos la cancha para repartirnos el espacio entre once jugadores y nos repartimos el esfuerzo para que sea una cosa pareja, la táctica es nada más que eso. Lo que si es importante es que hay conceptos básicos, pero también depende de los jugadores que uno tenga.

¿El talento es solamente para atacar o para crear?

No, también hace falta talento para defender.

¿Qué pueden hacer los equipos inferiores económicamente a Boca y River para sacar nuevos talentos?

Trabajar en inferiores, tener una buena estructura y buen trabajo en inferiores, tener buenos entrenadores, tener paciencia y trabajar ahí porque es el único camino. Pero con estructuras que abarquen muchas cosas porque con esta realidad que vivimos en Argentina, los clubes tienen que tener escuelas, lugares donde puedan habitar los jugadores que vienen del interior, inclusive los de Capital, para que los chicos puedan estar bien alimentados, bien cuidados, que reciban educación y sobretodo futbolística. Esa es la forma que pueden sostenerse. River lo hace, fíjate todos los jugadores que vende.

Una vez dijo que el fútbol argentino era el mejor del mundo, ¿Sigue manteniendo lo mismo?

Para mí el fútbol argentino es el mejor del mundo, pero no tengo ningún afán de comparación, no quiero hacer ningún tipo de comparación. No hay una objetividad tampoco en esto, nadie puede decir este es el mejor fútbol del mundo. Argentina saca muchos jugadores que rinden bien en casi todo el mundo y que tiene resultados en la Selección como para tener alguna medida, aunque ésta no sea objetiva tampoco. Pero lo que yo quiero decir es que para mí el mejor fútbol del mundo es ese que más me gusta, con el que más coincido en los conceptos que lo forman.

¿Cree que se perdió la identidad de nuestro fútbol?

Sí, creo que se perdió.

¿Hay carencia de jugadores números 5 en el fútbol argentino y cuál es el que le gusta más?

Es cierto, no hay un número 5 que se destaque. Yo creo que el hecho del doble 5 ha perjudicado mucho. A mí me gusta Sebastián Battaglia como juega de 5, pero tampoco es Fernando Redondo. El último "centro half" como se decía en el fútbol argentino fue Redondo, con calidad, con toque, con personalidad, con juego, tenía defectos por supuesto, pero fue el último número 5. Ahora no veo uno que se destaque mucho.

¿Le gusta Juan Sebastián Verón de número 5?

Sí. Le pega bien a la pelota, distribuye bien. Quizás no recupera demasiado, pero como Argentina recupera muy adelante, no necesita que recupere el número 5 y a veces hay un número 5 que no es tan recuperador, es un número 5 que es más distribuidor.

¿Le gusta el juego de la Selección?

En primer lugar vivimos un entorno en el que ha desaparecido el medio campo, se ha eliminado la pausa, la elaboración, en general en el mundo. Y la Selección Argentina no está exenta de ese virus, por decirlo de alguna manera. Pero vos fíjate que a mí que me gusta el fútbol de otra manera y no puedo frenar a Racing, todos los días estoy con los jugadores, todos los días diciendo que toquen, que esperen, que no vayan allá, hacelo jugar a dos toques, entrenamiento que no se puede ir al gol si no la tocan todos para que si un tipo está ahí vuelva, y no hay manera. Empieza el partido y Racing acelera a 180 y va a chocar. Si a mí me cuesta tanto frenar a un equipo que estoy todos los días. Es decir, en este momento me siento sin autoridad para decirte que no me gusta la Selección Argentina porque juega acelerada. Y cómo es posible que yo no pueda darle pausa a Racing, en general es así toma la pelota Mariano González y sale corriendo hacía adelante, toma la pelota Lucas Rimoldi y sale corriendo para adelante, y estoy todos los días diciendo paren y toquen y no hay manera. Entonces yo creo que el entorno es muy difícil de superarlo. No, no me gusta esa manera, me gusta otra, pero también me gustaría otra para Racing y no lo puedo lograr.

¿Tiene influencia en su trabajo el periodismo?

Sí, claro que sí. Hay mucha confusión. Y la culpa es del periodismo. Yo, por ejemplo, el otro día declaré que en dos ó tres jugadas a Racing le faltó picardía por una jugada dentro del área, y el título fue "A Racing le falta picardía" como si los partidos se ganarán ó perdieran por picardía, es decir la picardía es un condimento, Racing no ganó porque jugó muy mal, que son cosas distintas. Pero bueno, generalmente se obvian los matices y se va al aspecto blanco o negro, usted juega para el espectáculo o para ganar, es una pregunta que no tiene sentido. Si uno juega lindo es un romántico, no existe más el romanticismo hay que jugar a ganar. Nunca existió el romanticismo, uno trata de jugar bien para ganar, lo único que vale es ganar. Yo me acuerdo que Lazaroni, el técnico de Brasil en el Mundial ’90, decía no me vengan con que hay que jugar bien, que Brasil hace rato que no gana y hay que ganar, dos partidos seis puntos, es lo único que vale decía. Después jugó con Argentina y no mereció perder, entonces qué dijo: no merecimos perder, jugamos mejor; cosa que era verdad, pero entonces en qué quedamos. Yo creo que hay que atender a los matices, cuando uno dice jugar bien, qué significa jugar bien, respetar los conceptos básicos del juego, por ejemplo no se ataca desde cualquier lugar, no se defiende en cualquier lugar, la cancha tiene distintas velocidades, no se puede jugar a 180 kilómetros siempre, hay que respetar todo eso para que se juegue bien, y si además de todo eso tenes a Maradona, entonces en vez de jugar bien, jugas lindo, pero eso son cosas distintas.

Hace un tiempo criticó a Jorge Valdano y el marketing del Real Madrid, ¿sigue manteniendo esa idea?

No, pero yo no creo haber criticado a Valdano. Sí critico la manera que se maneja el Real Madrid, pero yo no sé si Valdano está de acuerdo con eso, porque Valdano es un contratado del club. Yo creo que el negocio se fue apoderando del fútbol, el fútbol tiene una raíz netamente popular, repudiado por las clases dominantes. Las clases dominantes se apoderaron del fútbol, lo transformaron en negocio, más ó menos se mantiene el juego, pero ahora ya se está perdiendo el criterio del juego, ya prácticamente a nadie le importa el criterio del juego, a muy poca gente le importa el juego. Pero estoy hablando de Europa, acá todavía, en Sudamérica hay gente que habla del juego como tal. Ahora le dan un criterio empresarial, que se organice como empresa me parece que es inevitable porque ya no pueden existir los clubes sociales de antes por razones económicas, pero que el criterio sea empresarial como el caso de David Beckham que el Madrid contrata a un jugador que no le hace falta por muchísimo dinero en el cual interviene la empresa Adidas en la contratación, porque a Adidas le conviene cambiar el mercado. Es una contratación netamente comercial y yo no estoy de acuerdo, más allá de la calidad de Beckham ó que a mi me guste, no me guste, eso no tiene nada que ver. El Madrid tenía como equipo, desde el punto de vista deportivo, otras necesidades: no tiene centrales, no tiene mediocampistas, tiene otras necesidades y sin embargo trago a Beckham porque se impuso el criterio comercial. Además el jugador está casado con una mujer que también vende, porque si Beckham estuviera casado con la gorda Clotilde de la esquina, no sé si Beckham era tan rentable. Es así, pero lamentablemente es así.

¿Qué jugador le gustaría dirigir?

Más allá de aquellos que tengo, a Zinedine Zidane.

¿Qué opina de los torneos cortos?

A mí me parecen injustos, por lo menos hecho como están en Argentina. En otros lugares como en México tenes un torneo a dos ruedas, en el otro hay zonas, entonces hay mas posibilidades de clasificación. Esto es injusto, perdes tres partidos y se terminó el campeonato. En los promedios, yo tampoco estoy de acuerdo, me parece que el tipo que se va a descenso se fue con los puntos de ese torneo.

¿Qué opina de la incentivación en el fútbol?

En primer lugar me parece un dinero gastado inútilmente; en segundo lugar, por más que a mí me incentiven para pelear con Mike Tyson no le voy a ganar, ó que me incentiven para correr 100 m, ó que me incentiven para jugar al fútbol, me incentivan para jugar de medio campista mañana en Racing, no voy a jugar bien. El dinero nunca significa nada. Yo he estado en equipos que le han dado a los jugadores en un partido importante premio exagerado, si cobraban $ 100 por cada partido en ese $ 500 y perdieron, es así porque el dinero no hace milagros porque la estimulación viene por otro lado. Si me dan un dinero para ganar y yo tengo que ganar, tampoco lo veo ni mal ni bien, o sea yo tengo que ganar y si además me dan un dinero bueno dame, pero no siempre se gana. No hay una relación directa: te doy dinero para ganar y ganas, no es así, en la mayoría de los casos no es así porque se le da dinero al más débil frente al más fuerte y el más fuerte le gana igual porque no hay mayor estímulo que el tipo que está compitiendo por el campeonato.

¿Y qué pasa cuando se arregla el empate?

El empate se arregla en la mayoría de los casos entre los jugadores adentro de la cancha y jugando. Empiezan a jugar y al cabo de un tiempo dicen ya está esto y eso no lo puede quitar nadie, no hay manera porque el empate no se arregla de afuera, nadie habla, pero empieza el partido 0 a 0 y los mismos jugadores ya empiezan a hablar que el partido ya está, que los dos zafan con esa historia y dale y ya está. ¿Cómo se para con esa historia? Eso está mal, eso está mal desde el punto de vista ético, pero cómo se evita que un jugador adentro de la cancha, aunque no hable, ya es una cosa tácita, dice bueno no arriesgo porque a mí con el empate me alcanza, y el otro dice lo mismo. A mí me da risa que hay periodistas que hablan que lo único que importa es el resultado y bueno en ese momento lo que están buscando es el resultado no tienen derecho a criticarlo, es decir es criticable, está mal, cómo se evita eso que es una tendencia natural.

¿Cree que los jugadores ó árbitros también están involucrados en la violencia en el fútbol?

No, los árbitros y jugadores no tienen nada que ver. La violencia yo creo que forma parte de la violencia que se vive en la sociedad. Y además tiene una característica particular dentro del fútbol que viene de muchísimos años atrás. Cómo se hicieron las barrabravas, a quiénes respondieron, de qué manera se les dio poder, por qué se les dio poder, qué relaciones tienen, con quién ... entonces es un problema complejo que no tiene nada que ver con los jugadores ni con el árbitro, según creo yo.

Pero a veces los jugadores dentro de la cancha incitan a la violencia

Bueno si un tipo hace un gesto no te autoriza a tomar un palo y darle palazos al tipo que tenes al lado. Yo creo que no.

¿Qué opina de la actuación de los árbitros?

Los árbitros argentinos son iguales a los del resto del mundo. Para mí los mejores de todos son los ingleses. No sé técnicamente, pero sí porque dialogan y conducen el partido, y ahora veo que los árbitros acá están tomando esa medida, conducen el partido.

¿Cree que los incidentes del partido Boca-Chacarita están relacionados con la política?

Posiblemente, por lo que estoy leyendo, es posible sí. Pero yo qué sé, no lo sé. Había muy poca vigilancia, sinceramente no lo sé, como está todo mezclado es posible sí.

¿Alguna vez un barra brava fue a "apretarlo"?

No, hablar con ellos sí porque uno se los encuentra siempre, pero apurar o eso no. Hasta ahora, por suerte no he tenido nunca ese problema. Hablar con ellos naturalmente, uno no puede evitarlo, pero yo no he tenido ese inconveniente.

¿Cuáles son las vivencias más lindas en el fútbol?

Muchas cosas lindas. En Racing viví muchos momentos de alegría: ganarle a Independiente en su cancha después de 17 años, ganarle a Gimnasia en su propio estadio después de 39 años en un muy buen partido de Racing es algo que no me lo vuelvo a olvidar, ganarle al Barcelona con el Madrid en el Santiago Bernabeu 5 a 0 fue una emoción tremenda que no me voy a olvidar nunca porque el Barcelona le había ganado el año anterior 5 a 0 al Madrid y eso era una especie de revancha que se dio de casualidad. Muchas cosas así grandes que se te rompe el pecho de felicidad. Cosas malas también, cuando te echan de un club es un golpe tremendo y me han echado varias veces así que también me han pasado cosas malas.

¿Cómo vio al equipo campeón de Carlos Merlo?

Yo creo que era un equipo que en determinado momento, cuando sintió la posibilidad de consagrarse campeón, era muy difícil jugar, era muy difícil tocar, ya era una desesperación que todos los jugadores salían con la locura esa y había que cumplir con ese objetivo. Yo creo que a ese equipo había que medirlo desde la emoción y no desde el análisis. Yo también vibré con ese equipo, y uno, al igual que la hinchada de Racing, no se detenía a analizar. Yo además estaba involucrado con muchos jugadores, con Racing, y sí, efectivamente yo no puedo decir que me gustaba, pero bueno queríamos ganar, queríamos salir campeones y eso se cumplió y a partir de ahí fue otra cosa.

¿Encuentra a la gente de Racing más tranquila, luego del Campeonato que lograron con Merlo?

Sí, sí, seguro que sí. Ahora la gente ya no tiene esa obsesión. De todos modos es un equipo grande y un equipo grande siempre quiere salir campeón, pero bueno antes tenía una obsesión tremenda. Antes se pensaba que las cosas solamente a Racing le podían pasar, como el 3 a 3 ante Vélez, y efectivamente le pasaron un montón de cosas parecidas. Una vez Racing estaba peleando un campeonato, no me acuerdo qué año, y le ganaba a Ferro 4 a 0 y perdió 5 a 4. O sea que a Racing le pasaron cosas que a otros equipos no. Una vez con Independiente, en el período anterior, jugábamos un clásico y ganábamos 2 a 0 en el primer tiempo y se cortó la luz, por lo que el partido se suspendió, después terminamos ganado 3 a 1. Iban 44 minutos, cuando llego al vestuario pienso bueno vamos ganando 2 a 0, pero había una sensación de derrota y decían esto nos pasa a nosotros nada más, esto le pasa a Racing como si hubiéramos perdido, pero íbamos ganando y faltaban 45 minutos. Bueno todo eso ya no existe, pero sí que es un equipo grande y un equipo grande quiere ganar siempre.

¿Qué le pasó cuando se cortó la luz?

No, nada, en ese momento nada. Creí que había sido un accidente, después me enteré que no, pero por gente de Independiente. Ahora eso es algo que yo no puedo comprobar.

Simultáneamente al ofrecimiento de Racing se comentó que también lo quería Independiente ¿Hubiera aceptado esa propuesta?

No lo sé. Esa fue una versión porque no me llamaron. Antes de venir a Racing se dio un hecho, que por lo menos a mí, no me había pasado nunca, que tuve cuatro ofrecimientos. Generalmente cuando uno no trabaja y pasa un tiempo, una vez me lo contó Héctor Alterio que le pasaba a él, fíjate vos Héctor Alterio con todo lo que tiene, y a mí también me pasa. Vos levantas el teléfono y te fijas si anda bien y decís no puede ser, no me llama nadie, tendrá sonido, le decís a un amigo que te llame a ver si funciona porque no te llama nadie. Y esta vez tenía tres ó cuatro propuestas concretas y una versión que me iba a llamar Independiente, que no se concretó y que no era cierta. Pero cuando yo colgué le dije a mi mujer, que es española, quién era, no sé le dije, dicen que me va a llamar Independiente y ella me dice tu no iras a Independiente, le digo en broma por qué no, porque tu eres de Racing, tu has estado en Racing y no vas a ir a Independiente. Pero no sé lo que hubiera pasado, no lo sé, no lo puedo decir, pero puedo confesar algo: de chico yo era hincha de Independiente, porque un tío mío llevó unas figuritas que había antes que eran una especie de acordeón y mi tío llevó dos, una de Racing y otra de Independiente y a mí hermano le tocó la de Racing y a mí la de Independiente, entonces yo empecé a mirar los jugadores de Independiente y me gustó Grillo, yo pegaba el póster de Grillo y me dormía mirando la foto de Grillo, soñando con ser Grillo y después trabajé con él en Boca y nunca se lo dije por vergüenza, pero trabajé con él y tuve la suerte de conocerlo, un tipo sencillo. Después eso terminó porque yo tenía 8, 9 años.

¿Por qué no siguió en Racing en la primera etapa?

Lo que pasa es que en ese momento el presidente que estaba opinó que había hecho mal un par de cambios frente a San Lorenzo por la Copa Mercosur públicamente y a mí no me pareció bien. Por otra parte, en ese momento el que decidía era el juez ó la sindico y a mí me habían llamado para renovar el contrato y el presidente de Racing en ese momento no me llamó. Entonces yo entendí que no tenía interés y como me había traído el presidente de Racing, yo por una cuestión de respeto elemental no renové el contrato.

¿Cree que ese equipo estaba para campeón?

Yo creo que sí, que estaba para campeón Racing en el próximo campeonato. Después me amigué con Daniel Lalin y tenemos una buena relación, pero ese fue un momento de calentura de él y mío y eso ya pasó, tenemos una muy buena relación. Y ahora con el gerenciamiento es un club muy organizado, totalmente organizado, estoy rodeado de las mejores condiciones, me han dado todo lo que yo pedí y me siguen dando todo lo que yo pido, por lo tanto estoy trabajando en las mejores condiciones. Lo único que puedo lamentar es que no tengo excusas para nada.


Entrevista realizada en el año 2003 por la Escuela Superior de Periodismo Deportivo

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